El declive económico actual ha generado la necesidad de nuevos canales financieros, que sean parte de alternativas sustentables y eficaces para la solución de problemas económicos. Un buen ejemplo es la solicitud de préstamos y créditos, que en los últimos tiempos ha adquirido aún más reconocimiento.

Pero… ¿Sabes cuál es la diferencia entre un crédito y un préstamo personal?

Por lo general, en amplio margen se conocen como conceptos similares, utilizados para definir la otorgación de una cantidad de dinero a una persona en concreto, con un tiempo establecido de devolución y algunos intereses, que varían de acuerdo a la entidad financiera, la cantidad, las cuotas y demás.

A continuación, te describiremos detalladamente el concepto de préstamo y de crédito para que logres identificar cada acción financiera, así como cuál es la mejor opción para cubrir gastos improvistos sin alterar tu presupuesto mensual por grandes cuotas de pago.

  • ¿Qué es un crédito?

La principal similitud de un crédito con un préstamo personal es su condición de dinero prestado, sin embargo, el crédito es una cantidad de dinero que una entidad financiera o bancaria pone a disposición de un cliente.

En esta acción financiera, el cliente no obtiene el dinero completo de una sola vez, sino que puede utilizarlo de forma parcial mediante una cuenta bancaria o una tarjeta de crédito. En cuanto a los intereses, varían de acuerdo a la cantidad retirada y al importe total de dinero.

Los créditos también poseen un plazo de devolución, que termina y se reinicia cuando el cliente cancela sus cuotas. Por lo general, están destinados a empresas para financiar su falta de liquidez, así como manejar distintas acciones dentro de una compañía que no cuente con los recursos.

  • ¿Qué es un préstamo de dinero?

Se trata de una operación financiera con dos protagonistas: el prestamista y el prestatario. En estos casos, existe una cantidad de dinero fija desde el principio del acuerdo, el cual conlleva un contrato con cláusulas legales que establecen: cuál es el tiempo de amortización, los intereses, las condiciones, los términos, las consecuencias por impago y demás.

Esta acción financiera se conoce como una herramienta útil hoy en día, ya que miles de personas solicitan préstamos rápidos para solventar una situación improvista; por lo general los intereses de un préstamo personal vía web dependen de la cantidad total de dinero aportado por el prestamista o entidad financiera.

Solicita préstamos personales para tus gastos improvistos

Si estás atravesando una situación financiera complicada y necesitas un préstamo rápido para un gasto necesario, internet posee múltiples entidades prestamistas dispuestas a colaborar con tu necesidad, solicitando pocos requisitos y con tasas de intereses adecuadas.

Los 7 beneficios de los préstamos rápidos

  1. Solucionan un inconveniente financiero cuando lo necesitas.
  2. Tienes la oportunidad de elegir el monto que deseas.
  3. No es necesario realizar hipotecas.
  4. Puedes elegir la fecha de devolución.
  5. Los requisitos son poco exigentes.
  6. No es necesario un fiador.
  7. Tendrás claro los intereses, comisiones y otros costos desde el principio del contrato.